lunes, 7 de febrero de 2011

Grises


Y el insomnio otra vez me traduce los pensamientos. El problema es creer en su sentido pero no saber interpretarlo. No es bueno tomar decisiones con la sensibilidad mensual. Los malos argumentos siempre vienen de la mano del dolor de ovarios.

¿Por qué la gente usa tu nombre entero cuando está enojada? Simplemente me hace temer a mi propia palabra y querer que se achique permanentemente, hasta en el documento.

Los ojos se hinchan por sueño, llanto y pocas ganas de ver. El problema de tener ojos chiquitos es que la hinchazón no deja que las retinas se impregnen de luz y todo se vuelve oscuro.

Los días de mares grises son eso, la mezcla de mucho negro y una pisca de blanco. Seguramente con la marea, el cambio de luna y el paso de la tormenta, el mar vuelva a su calma. Dejando de lado el negro, recobrando la serenidad del blanco y seduciendo de a poco con su verde. Y te volvés a ver los pies.

Y siempre pasa, los brazos dormidos vuelven a despertar, sabiendo que nunca fueron la bella durmiente. Las manos recobran su sentido táctil y las uñas quebradas comienzan a crecer. No es que siempre sea gris, es que hay que cambiar el lente de la cámara para saber de qué se vale la realidad.

4 comentarios:

  1. Siempre me pregunté por qué la gente usa tu nombre entero cuando está enojada... (es un momento gris)

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  2. Es porque la seriedad nos asusta,nos vuelve más grises. Gracias por pasar!

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  3. Hola...tus textos revelan que sos una mujer entera. Algún hombre se va a espantar de tanta mujer junta...

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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